Un tomate “extra-pequeño”, cuya planta es de apenas 4 cm de alto por 8 cm de diámetro, apto para cultivo en naves espaciales y en microhuertas urbanas ha sido desarrollado a partir de un cultivar de tomate cherry modificando uno de sus genes. La variedad ha sido obtenida en el Centro de Investigación en Ingeniería Genética de la Universidad de California bajo la conducción por la doctora Martha Lucía Orozco, ingeniera agrónoma de la Universidad Nacional de Colombia (U.N.) Sede Palmira y Ph. D. en Fisiología de Plantas de la Universidad de Washington. Esta variedad florece y produce raíces como cualquier otra, pero en tamaño extremadamente reducido y se destaca por producir más semillas que el tomate cherry. En el proceso se implementó edición de genes por CRISPR por el que se  eliminó (mutación) uno de los nucleótidos del gen que controla el tamaño de la planta. Anteriormente la Dra. Orozco contribuyó a identificar por primera vez un polipéptido hormonal que se mueve de una célula a otra que permite  activar sistémicamente las respuestas de defensa de plantas ante las plagas o el estrés.  “El mejoramiento de las especies por medio de técnicas modernas biotecnológicas como la edición genética se debe adelantar en cada país, porque cada territorio tiene condiciones ambientales específicas que inciden en el funcionamiento de las plantas desarrolladas. Cuando los materiales foráneos se van a introducir en una zona, se deben realizar pruebas antes”, precisa la investigadora.
Fuente: http://agenciadenoticias.unal.edu.co/detalle/article/egresada-de-la-un-desarrolla-la-planta-de-tomate-mas-pequena-del-mundo.html